En 1610, Juana de Lestonnac presentó al Señor los primeros frutos de la entrega generosa de quienes quisieron emprender con ella el Proyecto Educativo, buscó entonces una
fiesta de la Virgen para hacer esta ceremonia, con toda la solemnidad en la Capilla del Primer Colegio.
La celebración consistió en presentar y consagrar a la Virgen a las primeras estudiantes, el 21 de noviembre de 1610, y ponerlas bajo su protección.
Santa Juana de Lestonnac dejó establecido que esta celebración se renovara todos los años, en todas las obras de la Orden de la Compañía de María. 408 años después, la mantenemos vigente, con diferentes formas de celebración y expresión, en los colegios de la Compañía de María alrededor del mundo, pero con un mismo sentido de significación: María Nuestra Señora, siempre presente en nuestro Proyecto Educativo.
Es así que hoy, en nuestro colegio presentamos y consagramos a nuestra Madre los frutos del colegio, de este año 2018, compartimos con ustedes imágenes de esta celebración.